Memento Mori

    «Un minuto para distanciar nuestro bien del mal y ser seres eternos. Un segundo para decidir y para distinguir si estoy vivo o viviendo».

    Vivimos con prisa, las cosas que más importan son, quizá, a las que menos importancia les damos y nos sentimos incapaces para escapar de la inercia que nos arrastra de un día a otro copia del anterior.

    Nuestro estilo de vida, el que nos han impuesto, y las consecuencias del estilo de vida que han llevado los que nos han impuesto el nuestro han derivado en una crisis económica mundial que por supuesto se ha visto reflejada en otros aspectos como la salud. «El desempleo, el empeoramiento de la situación económica, los desahucios o el endeudamiento pueden producir o precipitar problemas de salud mental si no se pone remedio» suscribe una de las noticias aparecida en el diario El País en octubre de 2012.

    Pero ¿cómo ponerle remedio a una situación de tamaña magnitud? No está en nuestra mano, como sujetos individuales, poder revertir el sistema político y económico que asfixia a una mayoría para que una minoría privilegiada viva haciendo gala de todo tipo de lujos y excentricidades, aunque sí está en nuestra mano como sociedad. Pero para eso hace falta que la población despierte de su ya casi ancestral letargo y tome la decisión de empezar a hacer las cosas por ella misma.

    Uno de los lemas más sonados del 15-M fue: «Vamos despacio porque vamos lejos». Yo tengo mis reservas y soy algo más pesimista y diría: «Vamos despacio porque somos pocos, mal organizados y además no nos dejan avanzar», así que mientras es y no es, mientras nos organizamos, mientras caminamos y nos paramos a recobrar fuerzas y mientras nos siguen llegando noticias devastadoras como la citada anteriormente, a mí me vienen a la mente unos versos del gran Mario Benedetti, concretamente de su Defensa de la Alegría: «Defender la alegría como una trinchera /  defenderla del escándalo y la rutina / de la miseria y los miserables / de las ausencias transitorias / y las definitivas (…)».

        «El estilo de vida que nos han impuesto, y las consecuencias del estilo de vida que han llevado los que nos han impuesto el nuestro, han derivado en una crisis económica mundial».

    Y me vienen a la mente porque hay una frase que llevo grabada a fuego desde hace tiempo. Memento Mori: Recuerda que morirás. Y por eso aunque el frío queme y aunque el hambre apriete debemos defender nuestro derecho a ser felices. Que nadie pueda robarnos la alegría porque al fin y al cabo, y como dijo William Wallace en su versión cinematográfica en Braveheart: «Puede que nos quiten la vida pero jamás nos quitarán ¡¡La libertad!!».

    Así que tomemos conciencia, unámonos, luchemos por la justicia y seamos la voz de los que se han quedado sin ella porque hasta eso les han arrebatado. Porque ¿qué es si no vivir? ¿qué es si no defender la alegría?

    En esta ocasión son los cordobeses Estirpe los que ponen música a estas líneas y nos  invitan con su tema «Viviendo», extraído de la edición especial de su último álbum Neurasia, a que de cuando en cuando nos detengamos «un segundo para decidir si estamos vivos o viviendo». Y de esto sabe bastante su vocalista Manuel Ángel Mart, al que le mandamos un gran abrazo y todas nuestras fuerzas desde The Church of Horrors para que siga luchando y derrotando con éxito a esa maldita enfermedad llamada cáncer.

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Pies de foto:

    [Imagen principal] Chema Peral. 2015.