Se tarda unos años, y sufrir unos cuantos malos tragos, en entender y asimilar que lo raro, lo diferente, lo extravagante o lo peculiar son sólo eso, justamente lo que quiere expresarse con esos conceptos, que no hay nada despectivo en ellos, no hay nada malo ni peligroso en no ser como se dice que hay que ser.
«Vivir es fácil con los ojos cerrados» es el sexto largometraje de ficción escrito y dirigido por David Trueba. Una producción cercana y fresca en forma de road-movie, ambientada en la España de los 60, convertida en un viaje iniciático que posiciona a los protagonistas en contra de la rigidez del régimen social y moral del franquismo y el nacionalcatolicismo.